NUESTRA CONGREGACIÓN, ESTA EN MI CASA !!!!!!
martes, 4 de junio de 2013
sábado, 1 de junio de 2013
SI TE QUIERES SALVAR, HAZTE EL LOCO!!!
1 SAMUEL 21: 13-14-15 = Y CAMBIO SU MANERA DE COMPORTARSE DELANTE DE ELLOS, Y SE FINGIÓ LOCO ENTRE ELLOS, Y ESCRIBÍA EN LAS PORTADAS DE LAS PUERTAS, Y DEJABA CORRER LA SALIVA POR SU BARBA.
Y DIJO AQUIS A SUS SIERVOS: HE AQUÍ VEIS QUE ESTE HOMBRE ES DEMENTE., POR QUE LO HABÉIS TRAÍDO A MI?
ACASO ME FALTAN LOCOS, PARA QUE HAYÁIS TRAÍDO A ESTE QUE HICIESE DE LOCO DELANTE DE MI? HABÍA DE ENTRAR ESTE EN MI CASA?
Hoy por hoy, en este tiempo que nos ha tocado vivir, se nos hace cada día mas difícil convivir, aun con nuestros propios hermanos de la fe dentro de la CASA DE DIOS, y lo mas paradogico, es que fuera de ella, no enfrentamos una lucha tan feroz, pues sabemos que satanás anda como león rugiente, buscando a quien devorar.
Observemos lo que nos dice el SALMO 55: 12 AL 14= PORQUE NO ME AFRENTO UN ENEMIGO, LO CUAL HABRÍA SOPORTADO., NI SE ALZO CONTRA MI EL QUE ME ABORRECÍA PORQUE ME HUBIERA OCULTADO DE EL., SINO TU, HOMBRE, AL PARECER INTIMO MIO, MI GUÍA Y MI FAMILIAR., QUE JUNTOS COMUNICÁBAMOS DULCEMENTE LOS SECRETOS, Y ANDÁBAMOS EN AMISTAD EN LA CASA DE DIOS., es doloroso, pero es la realidad bíblica muchos no esperamos, que nuestros propios HERMANOS DE LA FE, nos declaren la guerra y nos persigan.
Porque suceden estas cosas entre hermanos, pues sencillamente, no debemos ignorar las maquinaciones de satanás, quien siembra en nuestros propios hermanos, lo siguiente:
1. CELO POR LOS MINISTERIOS, estos casos se ven y se repiten a diarios entre hermanos, pero lo que muchos no conciben, que sus propios PASTORES, también se dejen influenciar por este veneno mortal que muerde como áspid.
2.- LA ENVIDIA: es lo que llamamos, EL HOMICIDIO ESPIRITUAL, pues este deseo malvado, intenta desaparecer al hermano, pues satanás ministras en muchos hermanos, que si ellos no tiene el DON ESPIRITUAL, o el Señor no los usa como a el, quisieran verlo desaparecido.
Estos y muchos mas que nos terminaríamos de mencionar, y que usted conoce muy bien, nos lleva a la reflexión que nos menciona, la palabra del Señor en EFESIO 6, PUES NUESTRA LUCHA, NO ES CONTRA SANGRE, NI CARNE, SINO CONTRA POTESTADES HUESTES DE MALDAD Y GOBERNADORES DE LAS TINIEBLAS, EN LAS REGIONES CELESTE.
PUEBLO DE DIOS, urge la necesidad que entendamos, y pongamos en practica lo que llamamos UNA LOCURA ESPIRITUAL, para poder ser sobreviviente de estos ataques, satánicos y mortales, los cuales pueden apagar el fuego que DIOS puso en ti, o mas bien llevarte a una muerte espiritual., hagamos como hizo DAVID, se hizo el loco, y sobre todo BABEO, dejo hasta correr la saliva por su rostro, para poder salvar su vida de dos grandes enemigos, SAUL Y POSTERIORMENTE LOS FILISTEOS. El uso la sabiduría la cual DIOS DA EN ABUNDANCIA Y SIN REPROCHE.
Si usted querido hermano, observa, muchos siendo engañado por satanás y sus huestes, siempre se levantaran contra usted, se LEVANTARAN LOS TOBIAS, SAMBALAS Y LOS GESEN EL ÁRABE , hasta que CRISTO LEVANTE LA IGLESIA, seamos sabios como DAVID, y regocijemos en Dios.
1 CORINTIO 1: 18= PORQUE LA PALABRA DE LA CRUZ ES LOCURA A LOS QUE SE PIERDEN., PERO A LOS QUE SE SALVAN, ESTO ES, A NOSOTROS, ES PODER DE DIOS. Somos un pueblo SANTO, comprado a precio de sangre, no nos dejemos llevar de toda corriente de provocación la cual nos quiere quitar la comunión y por ende EL GOZO DE LA SALVACIÓN echemos fuera la contienda, las guerras inútiles la rivalidad, las pretensiones de grandeza y las prepotencias de los LIDERES, los cuales han sido llamados, a PASTOREAR y liderear OVEJAS, para entregársela al Señor, aquel día glorioso LEVANTAMIENTO DE LA IGLESIA.
SANTIFIQUEMONOS EN ESTA LOCURA, ASÍ PODREMOS LLEGAR AL TRONO DE LA GLORIA.
DIOS ME LO BENDIGA RICA Y ABUNDANTEMENTE,
PASTOR RAFAEL SOLANO
EL PAPEL, DEL VERDADERO ATALAYA DE ESTOS TIEMPOS !!!!
GUERRA AVISADA, NO MATA
SOLDADO, Y SI LO MATA, ES POR DESCUIDADO....
EZEQUIEL 3: 17-18 = HIJO DE HOMBRE, YO TE HE PUESTO POR ATALAYA A LA CASA DE ISRAEL , OIRÁS PUES TU LA PALABRA DE MI BOCA Y LOS AMONESTARAS DE MI PARTE.
CUANDO YO DIJERE AL IMPÍO DE CIERTO MORIRÁS , Y TU NO LE AMONESTARES NI LE HABLARES, PARA QUE EL IMPÍO SEA APERCIBIDO DE SU MAL CAMINO A FIN DE QUE VIVA, EL IMPÍO MORIRÁ POR SU MALDAD, PERO SU SANGRE DEMANDARE DE TU MANO.
Los reyes de la antigüedad defendían sus ciudades con muros altos y gruesos, de piedra. Encima de esos muros, había torres desde donde los atalayas podían ver a los enemigos que se disponían a atacar cuando aún estaban lejos. El atalaya tenía por obligación; velar y sonar la alarma cuando el peligro se acercaba; y, ¡ay! del atalaya que se quedara dormido en tanto vigilaba, o que, por cualquier causa, no sonara la alarma cundo había peligro, pues pagaba el descuido con su vida.
Dios le dijo a su profeta Ezequiel: “Hijo de hombre, yo te he puesto por atalaya… Cuando yo dijere al impío; De ciento morirás; y tú no le amonestares… el impío morirá por su maldad, pero su sangre demandaré de tu mano”. Ezequiel 3:17-18
La Palabra de Dios para los predicadores de hoy día es la misma: “Que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina” II Tim. 4:2. “Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues haciendo esto, te salvaras a ti mismo y a los que te oyeren”. I Tim. 4:16
Pero muchos predicadores de hoy día les gusta más ser diplomáticos que atalaya. Muchos han llegado a ser tan amigables con las fuerzas del pecado, que realmente tenemos al enemigo por atalaya.
¿Eres tú un pastor que tomas en serio la carga que Dios te ha dado? Predica la verdad tal como la Biblia la dice. No te preocupes por la popularidad. Rechaza toda oferta de predicar por dinero. No permitas que nada – ningún credo, ritual, o política – te sea más importante que la Palabra de Dios, pues él ha decretado que todos los predicadores – tanto los que se sientan en las bancas de tu iglesia como los que andan en las calles – se arrepientan, o mueran. ¿Estás entregándoles este mensaje? Si no, ¿qué del decreto de Dios para ti: “Advierte al impío, o muere?”
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